Dialogamos con uno de sus protagonistas
En una reunión clave con el Ing. Agr. Ricardo Weiss, se repasó la historia detrás de la pionera Ley de Agroquímicos de Córdoba, una norma que transformó el uso responsable de fitosanitarios en Argentina y se convirtió en modelo nacional.
El pasado 25 de abril se llevó a cabo una reunión híbrida entre el Ing. Agr. Ricardo Weiss, representante de la provincia de Córdoba y Coordinador Regional de Campo Limpio, y miembros de la Comisión Directiva del CPIA Río Negro: los ingenieros agrónomos Walter Nievas, Daniel López y Verónica Boltshauser. También participaron el Ing. Agr. Pablo Kiwitt, en representación del gobierno de Río Negro, y el Ing. Matías Apablaza.
El objetivo del encuentro fue dialogar con el Ing. Weiss sobre su experiencia en la elaboración de la Ley de Agroquímicos de Córdoba, una normativa pionera a nivel nacional. Esta ley, promulgada en 2004 y reglamentada en 2005, se convirtió en un modelo para otras provincias, gracias a un proceso de construcción colectiva que involucró intensos debates entre diversos sectores.
Weiss relató que la primera presentación del proyecto se realizó en un congreso de ingenieros agrónomos, aunque posteriormente una legisladora lo tomó como propio para difundirlo. A pesar de ese traspié, el proyecto fue formalmente presentado al Consejo de Agricultura de la provincia, donde atravesó un proceso de tratamiento de seis a siete meses hasta alcanzar un consenso definitivo.

Un factor clave para la sanción unánime de la ley fue la activa participación del presidente del Colegio de Ingenieros, quien en ese momento trabajaba en la Legislatura provincial. Gracias a su gestión, el proyecto fue presentado a todos los presidentes de bloque, quienes mostraron tanto interés que solicitaron firmarlo como coautores, lo que facilitó su aprobación sin objeciones ni abstenciones.
Además, un caso grave de intoxicación con fitosanitarios, ampliamente difundido por los medios, generó una fuerte sensibilización social y política sobre la necesidad de una regulación clara y efectiva.
A partir de la sanción de la ley, se inició un proceso de capacitación técnica, primero dirigido a los ingenieros agrónomos, y luego extendido a aplicadores y productores. En una primera etapa, las recetas fitosanitarias se realizaban en talonarios impresos distribuidos por el Ministerio y el Colegio de Ingenieros, incluyendo información detallada sobre el productor, el profesional responsable, el cultivo, la plaga y las recomendaciones de uso.
Actualmente, Córdoba cuenta con una receta agronómica digital, que solo puede ser emitida por ingenieros agrónomos matriculados, reafirmando el rol técnico y profesional en el uso responsable de productos fitosanitarios.